La larga agonía de la Nación Católica. Iglesia y dictadura en la Argentina
de Loris Zanatta
Buenos Aires, Sudamericana, 2015
Un amigo, con quien compartí en juventud inquietudes universitarias y políticas, tuvo la buena idea de recomendarme la lectura de este libro. Fue un muy buen consejo. No he leído nada que lo supere en la descripción de los funestos hechos de la década del setenta.
La tesis que presenta el autor es discutible: existió la idea fuerza de la construcción de una Argentina católica que fue la causa fundamental de la lucha fraticida en esa década. Y digo discutible porque también podemos encontrar en nuestra historia otras ideas fuerza o paradigmas, como por ejemplo el de construir una Argentina laicista. Trato siempre de huir de las tesis que absolutizan versiones parciales en el devenir de nuestra sociedad. Los matices tienen enorme importancia en la vida concreta. Creo que tanto el laicismo, el cristianismo, y más concretamente el radicalismo, el socialismo, el peronismo y muchos otros ismos han brindado aportes muy valiosos a la realización de esta sociedad concreta que nos toca vivir.
Además, cuando se hace un análisis sociológico de la vida de la Iglesia, se la reduce al nivel de un mero factor político, lo que a lo sumo puede ser una consecuencia de su misión evangelizadora, nunca una dimensión esencial de la misma.
Pero más allá de las antedichas salvedades, ciertamente importantes para mí, la descripción tan detallada y la excelente información que brinda este libro nos ayuda a comprender mejor esa durísima etapa de nuestra historia.
Desde el punto de vista eclesial, el autor ubica con mucha precisión las palabras y acciones de los protagonistas de aquel momento; y alejado de todo signo ideológico, atribuye y distribuye equitativamente las responsabilidades en el bien y en el mal de lo que nos ocurrió.
Personalmente me sentí muy identificado con la exaltación de la figura de monseñor Vicente Zazpe, que fue el obispo a quien admiré en aquel tiempo.
Para todos los que tenemos años y hemos quedado marcados por esa década, la lectura no sólo es fácil sino también apasionante. Creo que está lejos de lo que podría ser un relato ideológico y se acerca mucho a lo que fue la realidad de ese nefasto transe de nuestra historia.
